Palazzo Margherita: el capricho de Coppola

Palazzo Margherita: el capricho de Coppola



De la región Basilicata, en el empeine de la bota italiana y bañada por el mar Tirreno, proceden los Coppola. Allí se encuentra un Palazzo de balconadas e interminables jardines que los viera crecer y ahora los ve regresar. Recuperado por Francis Ford Coppola justo un siglo después de que su abuelo emigrara a las Américas, su sueño se ha materializado en un lujoso hotel boutique de nueve suites y mil encantos.

Tras la celebración de la boda de su hija, la también directora Sofia Coppola, el maestro vuelve a casa cual hijo pródigo para comprobar cómo el tiempo no ha pasado en absoluto. No allí. Su entorno natural perteneció, y no en balde, a la Magna Grecia Helénica. Tampoco los romanos, todos estandarte del buen gusto, pudieron resistirse a los suntuosos frutos que crecían en la tierra, entre ellos la uva Aglianico que da nombre a su vino.

Un auténtico paraíso de flores frescas, sábanas de hilo, baños palaciegos y una videoteca con más de 300 clásicos del cine italiano seleccionados uno a uno por Coppola. Un rincón mágico cargado de historia, cultura, sabor italiano y la esencia de una famiglia con solera que vuelve a casa y la abre a los más sibaritas. Palazzo Margheritta es el último capricho de Coppola y el primer lugar donde querrás perderte al más puro estilo italiano.

Más información: Palazzo Margherita